27
enero
2023
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Colt Technology, primer cliente terrestre de la Barcelona Cable Landing Station
La multinacional británica se instala en la nueva estación de cables submarinos de Barcelona. También se han anunciado la llegada de conexiones marinas por parte de empresas como Meta y DE-CIX.
La Barcelona Cable Landing Station es una estación de aterrizaje de cables submarinos de fibra óptica ubicada en Sant Adrià de Besòs, que está dando sus primeros pasos después de su puesta en marcha. Se ha anunciado el primer cable impulsado por Meta y se ha firmado un acuerdo con el operador DE-CIX. Además, la multinacional británica Colt Technology Services, especializada en rutas terrestres de fibra óptica y servicios de red, se ha convertido en el primer cliente terrestre de la estación.
Colt Technology Services se establecerá en Sant Adrià para conectar su estación de aterrizaje de cables, la Barcelona Cable Landing Station, con los principales hubs digitales de Europa como París, Londres y Frankfurt. La compañía tendrá acceso a más de 1.000 centros de datos y 31.000 edificios en 220 ciudades de unos treinta países de Europa, Asia y América del Norte. Además, también proporcionará una ruta exprés terrestre a otras estaciones de aterrizaje de cables, como Lisboa, Bilbao y Marsella.
Colt Technology ya tenía presencia en la Península Ibérica, donde ha desplegado una red de fibra óptica, nodos y conexiones con centros de datos en ciudades como Barcelona, Madrid, Bilbao y Lisboa. En Barcelona, la compañía cuenta con 13 puntos de conexión a centros de datos y ahora añadirá uno más. La compañía londinense también ha trabajado previamente con la propietaria de la estación de cables submarinos, la empresa catalana AFR-IX Telecom, que proporciona acceso a Internet en más de 50 países africanos.
La Barcelona Cable Landing Station tiene capacidad para alojar hasta ocho cables submarinos de fibra óptica provenientes de África, el Mediterráneo y Asia, además de clientes terrestres como Colt. Se espera que el tercer cable que llegue sea el Medusa, construido por AFR-IX y Alcatel Submarine Networks (ASN), del grupo Nokia, siendo el más largo del Mediterráneo con 8.700 kilómetros. Se espera que la estación alcance su capacidad máxima en 2027.
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